Ecos del futuro - Clima extremo, estadística y comunicación científica

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Clima extremo, estadística y comunicación científica

Leyendo ayer una entrevista en el diario La Opinión con el director del Centro Meteorológico Territorial de Canarias Occidental Víctor Quintero, quedo un poco desconcertado/confuso con respuestas que no considero precisamente buena comunicación científica. Ésta es la parte relevante de la entrevista.

-Canarias ha sufrido en los últimos años la presencia de temporales y tormentas de gran magnitud, ¿se volverán a repetir?

-Sólo hemos tenido una tormenta tropical en Canarias y fue la del Delta en 2005 y se cometió el error de no llamar las cosas por su nombre. Por este motivo, no deberíamos confundir los términos. En las Islas también hemos tenido otros fenómenos que han causado inundaciones y graves daños, que sí son más frecuentes ahora, pero que siempre han existido.

-¿Podemos hablar de cambio climático?

-No hay conclusiones claras que justifiquen que estos fenómenos adversos se produzcan por el cambio climático. De hecho, los informes que ha realizado el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) no dejan ideas claras sobre ellos.

-¿Entonces todos estos fenómenos que se producen no son producto del cambio climático?

-Con el cambio climático hay que tener un sentido del equilibrio mayor del que hay. No existe razón para negarlo y si existe la posibilidad hay que investigarla, tal y como se está haciendo. No obstante, tampoco hay que cuestionarse si todos los fenómenos son producto del cambio climático.

-¿Qué ocurre entonces?

-Achacar todos los fenómenos meteorológicos extraordinarios al cambio climático es muy sencillo. Creo que existe muy poca memoria meteorológica.

-Pero si se hacen los estudios es por algún motivo ¿ no cree?

-La ciencia cuando inicia una investigación siempre parte de una hipótesis. En esta ocasión se parte de la observación de cambios. Los informes del IPCC indican que habrá un aumento de las temperaturas en diferentes zonas del planeta, partiéndose de una conjetura que provoca que se hagan esos mismos estudios.

-¿Y cuál es su opinión personal?

-Cuando hablamos del cambio climático hay que ser un poco más serio. La gente se cuestiona todo como, por ejemplo, la presencia del calor, un fenómeno tan habitual en verano. Hay una idea generalizada sobre el cambio climático en la sociedad y las comparaciones que se hace con otros años se deberían de hacer con unos datos mucho más concretos.

Hay varios problemas en sus respuestas, pero me voy a centrar en uno que es ubicuo. La transmisión al público de conceptos estadísticos y cálculo de riesgo. ¿Cómo hubiese respondido yo a esas preguntas?. Seguro que peor que él en el calor de la entrevista, pues no soy ni buen comunicador ni por supuesto director de un Centro de investigación. Pero con la tranquilidad que me permite un blog personal voy tratar de dar respuestas que considero podrían ser más apropiadas.

-¿Podemos hablar de cambio climático?
No con total seguridad
-¿Entonces todos estos fenómenos que se producen no son producto del cambio climático?
Sí que podrían serlo.
-¿Qué ocurre entonces?
Es similar a la confianza en un dado. Usted empieza una partida de parchis y saca tres seises seguidos. ¿Está el dado cargado para favorecer la aparición de un seis?. No puede asegurarse. A veces salen tres seises seguidos. Tiene que seguir tirando el dado para averiguarlo. Los fenómenos de tiempo extremo podrían haberse producido de cualquier manera sin la influencia del aumento de la temperatura por las emisiones de CO2 industriales, pero el aumento de CO2 y el consecuente aumento de la energía disponible hace que estos sean más probables, es decir, el dado del clima está cargado.
-Pero si se hacen los estudios es por algún motivo ¿ no cree?
Los estudios se hacen para constatar si el dado climático está cargado o no y en caso de que lo esté, cómo va a influir en la frecuencia de eventos meteorológicos adversos en el futuro.
-¿Y cuál es su opinión personal?
Mi opinión personal es irrelevante. Muchos investigadores están estudiando a fondo la relación entre el cambio climático que se está produciendo y el aumento de la frecuencia de este tipo de eventos más extremos. Los estudios realizados hasta la fecha parecen indicar que su frecuencia está aumentado, lo que no significa que podamos atribuir todos los fenómenos meteorológicos extremos ni mucho menos al cambio climático. Sin el cambio climático también existirían fenómenos de este tipo, pero no se producirían con tanta frecuencia.

La figura fundamental que tiene que tener en mente todo comunicador científico de la relación entre fenómenos meteorológicos extremos y cambio climático es la aparecida en el AR3 del IPCC en 2001.

Un fenómeno meteorológico extremo --como una ola de calor-- es un evento infrecuente. La primera figura indica lo que ocurre cuando se produce un cambio climático que implica por ejemplo un aumento de la temperatura media. Las frecuencia de cada rango de temperaturas tiende a seguir una distribución del tipo campana de gauss. Si aumenta la media aumentan la frecuencia de las temperaturas extremas. Pero también se puede producir un aumento de la variabilidad (es decir de la anchura de la campana de gauss) --tal y como se indica en la segunda figura-- lo que implicaría aumento tanto de los extremos fríos como cálidos.

Los estudios parecen indicar que la situación con respecto a las temperaturas es más del tipo de una combinación de ambos cambios en la distribución de temperaturas tal y como se indica en la tercera figura, lo que implica un aumento más importante de los records de temperaturas extremas.

Otros fenómenos meteorológicos como las precipitaciones no tiene por qué seguir el mismo patrón, pero el concepto es análogo.

La analogía del dado es aquí interesante. Si el dado está cargado significa que tendremos más posibilidades de que salgan números elevados y por tanto la media --que en condiciones normales estaría en torno a 3,5-- aumentaría. Aumentaría la frecuencia de los números extremos. Sin embargo, en un dado la analogía correcta implicaría no sólo cargarlo hacia números más elevados, sino ponerle más caras y números más elevados (un siete por ejemplo) de tal manera que el que usara ese dado no sólo tendría la ventaja de obtener números elevados con mayor frecuencia, sino que podría sacar números inauditos para los dados.

Las recientes olas de calor y records de temperatura en 17 países --cubriendo casi un 20% de la superficie continental del planeta-- no son evidencia aplastante de ese siete climático. La climatología es más complicada. Pero si se tratara de un fenómeno al margen de la influencia de las calentamiento global antropogénico, su frecuencia estimada es de un evento de este tipo cada varios miles de años. Bien. Ahí va otro símil. El vecino siempre juega dos euros a la primitiva mientras que usted sólo juega un euro. Un día el vecino se saca el premio gordo. ¿Se lo hubiese sacado de igual manera si sólo hubiese jugado un euro como usted?. Nadie puede contestar con certeza a esa pregunta, pero ¿qué es lo más probable?.

Más información en ¿Es posible atribuir los fenómenos meteorológicos extremos al calentamiento global?.

2010-09-06 23:54 | Cambio climatico, Sociedad |

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