Reflexiones sobre ciencia, economía, ecología, política y comportamiento humano
< | Octubre 2024 | |||||
Lu | Ma | Mi | Ju | Vi | Sa | Do |
---|---|---|---|---|---|---|
1 | 2 | 3 | 4 | 5 | 6 | |
7 | 8 | 9 | 10 | 11 | 12 | 13 |
14 | 15 | 16 | 17 | 18 | 19 | 20 |
21 | 22 | 23 | 24 | 25 | 26 | 27 |
28 | 29 | 30 | 31 |
Series
En la red
Categorías
2006-2024
Orientada a hacerles creer que comprenden una cosa que de hecho no comprenden y gratificar lo que creo que es uno de los deseos más bajos de la gente moderna, a saber, la curiosidad superficial sobre los últimos descubrimientos de la ciencia
Hay en la Ofrenda Musical un canon particularmente insólito. Se llama "Canon per Tonos" y es a tres voces. La de arriba canta una variante del Tema Real mientras las otras dos ejecutan una armonización canónica basada en un segundo tema. La más baja de estas dos voces canta su tema en do menor (que es la tonalidad del canon en su con junto), y la otra canta el mismo tema, pero desplazado hacia arriba por un intervalo de quinta. Lo que hace de este canon algo distinto de cualquier otro es que cuando termina -cuando parece terminar, mejor dicho- no está ya en la tonalidad de do menor, sino en la de re menor. De alguna manera se las ha ingeniado Bach para modular (cambiar de tono) frente a las narices del oyente. Y además, el canon está construido de tal modo que su terminación se enlaza sin la menor violencia con su propio comienzo, de manera que puede uno repetir el proceso y, comenzando ahora en la tonalidad de re, terminar en la de mi, y recomenzar entonces en mi para terminar en fa sostenido, etcétera. Estas sucesivas modulaciones van llevando el oído a provincias tonales más y más remotas, de modo que a la tercera o cuarta de ellas se siente uno desesperadamente lejos de la tonalidad inicial. Pero, como por arte de magia, al llegar a la sexta de las modulaciones queda uno instalado de nuevo en la tonalidad de do menor. Todas las voces se hallan ahora exactamente una octava más arriba de como se hallaban al principio y en este punto puede darse por concluida la pieza de una manera musicalmente agradable. Cabe imaginar que tal fue la intención de Bach; pero no hay duda de que a Bach le encantaba la idea de que este proceso siguiera y siguiera ad infinitum, y. quizá sea ése el sentido de las palabras que escribió al margen de la pieza: "Que así como se levanta la modulación, así se levante la Gloria del Rey". Para subrayar esa calidad suya de potencialmente infinito, el nombre que le doy es "Canon Eternamente Remontante".[...]
2008-08-28 15:13 | Ocio |
URL de trackback de esta historia http://ecos.blogalia.com//trackbacks/59139
1 |
|
||
¡Qué bueno! :D
|
2 |
|
||
Pedro J: me preguntaba yo quién era esa Esther que has puesto ¡y resulta que es Escher, mi dibujante favorito! También me ha encantado las analogías con Bach, uno de mis músicos favoritos. De Gödel nada puedo decir, lamentablemente :-(
|
3 |
|
||
¡Juas! Otro blogalita que se está leyendo El Ladrillo
|
4 |
|
||
Por cierto que leí hace poco que Hofstadter se había quedado frustrado porque no se había interpretado bien su libro y que escrío otro para explicarse mejor.
|
5 |
|
||
Corregido lo de Esther
|
6 |
|
||
Curiosa esa cita que haces de Wittgestein.
|
7 |
|
||
Fíjate rvr que el libro es de 1979 y tiene 239 reseñas en Amazon de las cuales 183 son 5 puntos.
|
8 |
|
||
Sin duda es un ladrillo, pero un ladrillo magnifico. Si es cierto que tiene capitulos verdaderos tostones, pero eso no le quita ningun valor al libro, que en general es una obra de arte. Y los dialogos son autenticas maravillas, sobre todo el del canon cangrejo. Una genialidad sin duda que al menos yo me tendre que releer porque seguro que se me quedaron un monton de detalles sin ver.
|